martes, 4 de septiembre de 2012

No es por incordiar... es por entretener.


                                           
Perdónenme ustedes, pero es que últimamente estoy muy pesetera, y me cabreo, tengo que reconocer, por  detallitos insignificantes, por cosas tontas y sin importancia  que pasan en este maravilloso país. En las importantes prefiero no pensar.
Ya saben, con todas estos problemas  que nos tienen apabullados, preocupados, hartos, todos esos nombres técnicos que maneja todo el mundo,  el que sabe y el que no. Ya se habrán dado cuenta a lo que me  refiero, al estado de la  economía, A la “prima” esa y a toda la parentela, y cómo hacer que los ricos lo sean más  a costa de lo que sea.
Y eso del “rescate” a mí me recuerda más a las princesas encerradas en la torre del castillo, la  princesa Sigrid de mis tiempos, no esperó tanto a que la rescataran, pero es que el Capitán Trueno sólo se guiaba por ¡el amor!


Como les decía estoy muy sensible en lo que  al euro-peseta  se refiere, y en cuanto que oigo que se va arreglar algo, que no le veo mucho interés, la verdad, pues me pongo nerviosa a contar con los dedos (es una manía) y me pregunto ¡ESTO CUÁNTO VA A COSTAR! ¡ESTO QUIÉN LO VA A PAGAR!
Por ejemplo: “El Libro Códice Calixtino”,  que desapareció por arte de magia de un señor electricista  que pasaba por allí?  ¡No!, que casi, vivía allí. Se lo llevó por fastidiar  a sus dueños  pues vaya usted a saber por qué, a lo mejor hacía mucho tiempo que no le preguntaban por la familia. El asunto es que ahora después de  recuperarlo y con tanta emoción pues ¡hale!, a poner todos los medios habidos y por haber (que no le falte de ná)  para que esto no vuelva a ocurrir. Y aquí es donde me pongo nerviosa y a  contar con los dedos… y después las preguntitas:   ¿La Iglesia?, no creo, es pobre, y cuando alguien insinúa que en las  circunstancias en que se encuentra el país debían  de hacer por solidaridad cristiana  lo que todo el mundo hace   por obligación como:
                                                         ¡PAGAR EL I.B.I.!
Van y se ponen por las nubes, amenazando que se puede terminar el “Maná” de los necesitados. Horror.
Y mientras en el mundo de los humanos normales, pasa lo mismo todos los días, no cambia nada, mejor dicho sí cambia, porque según los voceros del gobierno y adláteres, esto  va a ir a peor.

Pues mientras, también me coge sensible lo del "Hecce Homo" de Borja. Lo ridículos que somos en este país y hacer de una tontada una noticia que ya ha recorrido el mundo. Tiene gracia la cosa si a esta pobre señora el trabajito de recuperación le hubiera quedado bien, lo mismo no le dan ni las gracias, pero como no ha sido así, hasta la heredera del  “artista” la pone a caldo, y si no es porque la cosa  hace gracia a la gente y el asunto toma otros derroteros, ya le iban a pedir un indemnización y todo. Ole.
No creo que el cura no lo supiera, al contrario le parecería estupendo porque gracias a la afición y a la fe de esta buena vecina les saldría gratis. Pero no, no le salió bien, y entonces se lía la de “Dios es Cristo (perdón, lo tenía a huevo).  Y se llama a los expertos-entendidos,  a quien haga falta, que tampoco falte de ná. Y sin tardanza se presentan allí con toda su impedimenta, todo lo necesario para hacer el milagro, (lo sigo teniendo a….) pero no voy a abusar.
Y después de investigar la gran obra de arte pifiada, declaran  risueños,  “no creemos que haya problemas para poder recuperarlo”. ¡Ah! Menos mal!, ¡que peso nos quitan de encima!  Pero eso ya no importa porque los vecinos quieren aprovechar el tirón  de la obra mamarracho, atrae a los visitantes y de paso compran lo típico de allí, y todo lo que sea negocio está por encima del buen nombre, del pueblo, del arte, y de la misma Iglesia, que para eso estamos en crisis
 Y para rizar el rizo ¿oigan, se pueden recuperar  las dos imágenes? La buena y la mala,  “se mirará, puede resultar dificultoso, y si no se puede, se recuperará la original”
Pero vamos a ver, digo yo, si tenía tanto valor (artístico, claro del otro ya sé que sí)  la imagen en cuestión, por qué no llamaron a un profesional desde el principio.  Yo lo que haría en la oscuridad de la noche, sería darle un manita de cal a la pared y aquí paz y después gloria. Total  de imágenes religiosas estamos sobrados.
Pero si se deciden a arreglarlo: ¡ESTO CUÁNTO VA A COSTAR!, ¡ESTO QUIÉN LO VA A  PAGAR! Y empiezo a contar con los dedos.

Imágenes Internet.

Lo siento, yo no doy pá más


P. Merino 

3 comentarios:

  1. Ven, Capitán Trueno, haz que gane el bueno. Podría ser nuestro grito de guerra. Yo también leía aquellos inolvidables tebeos.
    Comparto tus sentimientos, Puri. No damos pa más.Cada vez más peseteros, qué remedio.

    Besos

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  2. Como sigan así, no sólo dedos, sino muchas cosas más, van a faltarnos.

    Besos

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Por razones ajenas a la autora de este blog, no se admiten comentarios anónimos. Pido disculpas y espero volver a permitirlos más adelante. Gracias.